Diseño Zero-Drop
Las sandalias con Zero-Drop en las que el talón y la puntera están al mismo nivel, proporcionan una experiencia de caminar más natural. Existe el inconveniente es que las sandalias con Zero-Drop inicialmente pueden causar molestias o tensiones a quienes no están acostumbrados a un soporte mínimo hasta que los pies se va adaptando a la nueva postura.

Suelas ultrafinas y flexibles
Las sandalias tienen suelas ultrafinas, lo que las hace ligeras y cómodas, así se reduce el peso sobre los pies durante largos períodos de uso. La flexibilidad de las suelas permite un mayor rango de movimiento del pie.

Caminar natural
Caminar de forma natural se refiere a cómo nuestros pies y nuestro cuerpo están diseñados para moverse sin la interferencia de un calzado moderno y muy acolchado. Implica cargar hacia la parte media del pie o en el antepié en lugar de en el talón, lo que promueve una marcha más natural que puede mejorar la postura, el equilibrio y la salud general del pie.

Fortalece tus pies
Las sandalias barefoot favorecen la marcha natural al proporcionar un acolchado mínimo y permitir que los pies se muevan libremente. Imitan la sensación de caminar descalzo, fomentando el uso de los músculos intrínsecos del pie. Esto ayuda a fortalecer los pies, mejorar la flexibilidad y mejorar la propiocepción.

Siente la tierra que pisas
Estas sandalias ofrecen una mayor libertad y una conexión más fuerte con la naturaleza, lo que permite una mejor retroalimentación sensorial.

Lo mejor para superficies suaves
Las sandalias barefoot son ideales para caminar sobre terrenos naturales como césped, senderos de tierra, arena y piedras pequeñas. Las superficies duras tienden a ser más ásperas para los pies y las sandalias barefoot no absorberán toda la presión ejercida sobre las plantas.

Perfectas para viajar ligero
Son ultraligeras y fáciles de guardar, ocupando el mínimo espacio en tu equipaje. Nuestras sandalias Bokyna barefoot son tan flexibles que puedes plegarlas para ahorrar aún más espacio.

Usar sandalias barefoot sin la debida consideración puede causar dolor e incomodidades adicionales. Si tienes síndrome de Ehlers-Danlos, hipermovilidad severa, deformidades musculoesqueléticas o neuropatía periférica, consulta a un profesional de la salud antes de usar nuestras sandalias barefoot.

1. Empieza despacio.Usa tus sandalias barefoot durante períodos cortos para permitir que tus pies se adapten gradualmente a la nueva experiencia.
2. Aumenta el uso de forma gradual día a día..Esto ayuda a que tus músculos se adapten sin sobreesfuerzos.
3. Escucha tu cuerpo.Observa cómo se sienten tus pies y tu cuerpo cuando llevas las sandalias. Es posible que sientas algunos músculos trabajando que no había notado antes.
4. Suave transición para actividades. Utiliza las sandalias barefoot para actividades cotidianas antes de realizar la transición a actividades más intensas como caminar o correr.
5. Escucha al dolor. Si sientes algún dolor, tómalo como una señal de que debe reducir el ritmo. Descansa y poco a poco retoma el uso de las sandalias.
6. Controla si hay inflamaciones. Hinchazón, calentamiento o enrojecimiento son signos de inflamación o lesión. Si esto ocurre, da tiempo a tus pies para que se recuperen por completo antes de volver a usar las sandalias.
7. Sé paciente.Dale tiempo a tu cuerpo para que se adapte. La transición a sandalias barefoot requiere paciencia y que prestes atención a cómo responde tu cuerpo.